Cuando hablamos de interiorismo, no solo hablamos de estética, sino que de comodidad, gusto, estilo de vida. Un espacio pensado y planeado desde el interiorismo recalca los espacios, les da carácter, tienen identidad, personalidad, te definen y te hacen sentir tu hogar de otra manera. Por ello, es tan importante tener un equilibrio entre la estética y la funcionalidad para conseguir espacios acogedores. No todo lo que nos gusta es práctico, ni todo lo práctico queda bien. El objetivo es encontrar una serie de elementos, con colores escogidos específicamente para cada ambiente, para cada función, y según los muebles o textiles que vayamos a poner en cada lugar.
Aquí te mostramos ejemplos de espacios acogedores que, con ciertos elementos y colores logramos dar esa sensación que nos hace querer pasar tiempo allí. De eso se trata, de querer estar en casa, de que nos sintamos cómodos, y que cada espacio se amolde a nuestras rutinas y actividades de manera práctica, funcional pero también agradable a los sentidos.
Un espacio de trabajo, no es un simple escritorio donde trabajamos. Necesitas encontrar el ambiente perfecto para desconectar, para inspirarnos y así poder crear. Conseguiremos espacios acogedores de este tipo con elementos únicos y originales, que den identidad y que a la vez no carguen, usando colores que no cansen. Lo ideal es usar colores neutros, en mesa y paredes principalmente, dándole el toque de diferencia a los objetos que queramos. Alfombra, cuadros, estanterías. Un toque muy acogedor y a la vez práctico, lo da un tablón donde colgar nuestras notas, fotos, recuerdos que hagan que ese espacio sea más personal aún.
Para darle el toque acogedor a una sala de estar o a un dormitorio, seguimos con los colores neutros para los elementos “fijos”, pudiendo dar juego con cojines, alfombras de otra textura, materiales, flores, entre otros. Con un banco multifuncional conseguiremos crear un rincón de lo más acogedor. Desde un arcón para guardar todo lo que necesitemos, o para sentarnos y leer con nuestra taza de café, este banco cumple con ambas expectativas: ser funcional y aportar calidez al ambiente.
Que todo esté en una parte de la habitación no es sinónimo de agobio, todo dependerá de cómo se coloque, del orden, los objetos y los colores que usemos. Un suelo de madera o similar da mucha calidez. Esta zona forma un todo, tiene sentido, es apetecible estar bajo ese “techo” que forma la cama. Conjugar el orden, limpieza y elementos elegidos con un propósito estético y práctico hacen que esta sea una solución perfecta. El blanco es el color estrella en decoraciones de este tipo, espacios pequeños que quieren conseguir luz y amplitud. Esta solución se suele elegir para estancias donde necesitamos más espacio pero las dimensiones son pequeñas, aprovechando así al máximo los metros y aportando esa calidez que buscamos resaltar en este post.
Vamos a hacer una propuesta un poco más divertida para el salón. Es aquí donde contamos con más espacio, y cuando recibimos gente en casa, es el sitio donde pasarán la mayor parte del tiempo. Es lo que más personalidad le da a nuestro hogar y hace que más se identifique con nosotros. Optaremos por darle un toque de color, objetos con personalidad, aquí podemos jugar con la mesa, los cuadros, los cojines y por supuesto, la estrella de este ambiente: el sofá. Un sofá cómodo a simple vista, una mesa liviana y con personalidad, cojines variados que en su conjunto van muy bien combinados y unos cuadros a gusto de quienes vivan en esta casa. También algo muy importante es la iluminación. Podemos tener punto de luz central, acompañado por lámparas de pie para el suelo o con diseño sobre los muebles auxiliares, que le dan por la noche ese toque acogedor que buscamos, con luces suaves y que se adaptan a lo que queremos hacer en cada momento y rincón. Por último, el toque final lo daría una alfombra que rompa un poco esa neutralidad dándole color con los tonos usados para los cojines, por ejemplo.
Con estas propuestas, queremos aportarles ideas de como conseguir espacios acogedores y darle ese toque cálido y acogedor a algunos ambientes de nuestro hogar. En resumen podemos decir que con orden, colores neutros para elementos principales y un toque de color para los objetos más efímeros, junto a elementos originales y funcionales para dar carácter, conseguiremos fácilmente que nuestro espacio sea apetecible y muy acogedor.
Un saludo,